12/4/10

La Nuava Alianza se Tambalea

Lía encontró una puerta secreta tras el desvencijado trono que les llevó a una especie de cámara de meditación. En ella parecía haber un asiento tamaño halfing y Rosco no dudó en comprobar si era confortable, como era su costumbre. Al sentarse en el rudimentario banco, observó unos huecos en su parte interior, uno de ellos estaba lleno de figurillas. El mediano, que aunque parecía despreocupado no tenía la menor intención de tocar nada que le pudiera dañar, usó su daga para extraer las figurillas del agujero. Poco después, no pudo resistirse a cogerlas y una voz en su mente le dijo: "Formula tu pregunta y lanza las cuentas", y así lo hizo el mediano que preguntó cual era el camino más corto hacia el Templo del Agua y el oráculo respondió: "Dirígete a la Antigua Escalera". Tras unos minutos de reflexión, los compañeros decidieron seguir adelante en su exploración del primer nivel del Templo. En esto, se encontraron con una puerta sellada con unas runas que el propio Rosco descifró como mágicas, el mago lanzó un conjuro que eliminó las runas y todos entraron en la estancia. Al poco tiempo se dieron cuenta de que se trataba de una especie de cripta y todos empezaron a sentirse mareados y a sufrir sudores fríos, algo en esa cámara les estaba afectando. A pesar de que observaron varios nichos, decidieron no coger nada pero una vez fuera de la cripta, Eliot decidió volver a por una majestuosa capa que parecía mágica. El humano se puso la capa sin saber que poderes podría albergar, pero no notó ningún efecto. El grupo empezaba a dudar de Eliot, pues parecía tomar las decisiones por su cuenta sin el consenso de todos, lo que impacientaba a más de uno.
En su extenso recorrido, llegaron a una gran y majestuosa cámara donde incluso había una pirámide escalonada en su centro, sin duda se trataba del Templo de la Tierra. Al parecer no había nadie, pero una vez entraron, el suelo comenzó a temblar. Poco después aparecieron unas horribles bestias hechas de roca y tierra, que en principio parecían inmóviles. Una vez se acercaron a la pirámide, donde descansaba una caja a sus pies, los elementales de tierra avanzaron con lo que parecía una pauta de movimiento hacia las cuatro esquinas de la torre. Todos los compañeros, al ver que esto podría provocar un fatal desenlace, decidieron abandonar la estancia. Los elementales volvieron a sus posiciones y los héroes decidieron hechizar a Lía para que fuera invisible y así pasar inadvertida por los elementales. La elfa aceptó poner su vida en peligro no de muy buena gana, pero a ella también le picaba la curiosidad de lo que escondería esa caja. Lía entró con tanto sigilo que ni si quiera una leve ráfaga de viento hubiera levantado menos sospechas de que algo más a parte de los elementales había en la estancia. Cuando se hizo con la caja, salió lo más rápidamente posible de la cámara para reunirse con sus compañeros. La decepción vino cuando al observar el contenido del preciado objeto, sólo encontraron utensilios rituales de poco valor.
Rosco parecía empecinado en encontrar una escalera que le llevara al Templo del Agua, como le había revelado el oráculo, entraron en un pasillo donde sin darse cuenta, se empinó hacia delante, provocando que Eliot y Emén se precipitaran a un pozo. Pronto empezaron a oír un inquietante ruido de ratas que iba subiendo de volumen. Emén lanzó su cuerda y se la ofreció a Eliot para que este saliera antes que ella, pero el humano usó su pértiga para dar un salto hacia donde se encontraban el resto de compañeros. La semiorca se quedó algo confusa por un segundo y casi instintivamente, trepó su cuerda para evitar a las decenas de gigantescos roedores que invadieron el pozo segundos más tarde. Después entraron a una estancia donde varios osgos del Templo de la Tierra les indicaron por donde tenían que bajar al nivel inferior. Eliot dijo que deberían volver a matarlos, pues su misión era limpiar la zona de todo mal, pero entre todos calmaron las ansias del humano por entablar una disputa que de momento no era necesaria. Siguiendo sus indicaciones, llegaron a un corredor donde habían varias celdas. Lía abrió la primera de ellas, donde un ajado hombre aguardaba totalmente en silencio. La elfa le dijo que era libre pero el ser no contestó ni reaccionó de forma alguna, cuando Lía lo daba por imposible y se dio la vuelta, el ser la agredió por la espalda revelando su verdadera identidad, un zombie. Tras deshacerse del no muerto, inspeccionaron con cautela el resto de celdas. En una de ellas se hallaba Wonilon, un gnomo que al ser liberado se unió al grupo clamando ser un gran guerrero. Gáremond intercambió unas palabras en su idioma racial con su nuevo compañero.
Encontraron la escalera que llevaba al nivel inferior y decidieron descansar antes de ir más adelante, pues los lanzadores de hechizos necesitaban preparar nuevos conjuros. Antes de descansar Emén le proporcionó una espada corta pues el gnomo aseguraba que le habían despojado de sus pertenencias cuando le atraparon y en eso se dio cuenta de que le faltaba algo que habían encontrado en la cámara de las arpías. La semiorca lanzó una incriminatoria mirada hacia todos los miembros del grupo y quiso inspeccionar uno por uno a todos ellos, hasta que llegó a Eliot. Este intentó sin demasiado éxito ocultar el cáliz que faltaba en el saco del tesoro y a la semiorca se le inyectaron los ojos en sangre. A su vez, todos los miembros del grupo lanzaron sus acusaciones contra Eliot y este se defendió como pudo hasta que todo quedó en un embarazoso malentendido, el cáliz volvió a la mochila de Emén y todos dejaron claro que ella era "la encargada del tesoro" y asignaron a Wonilon a vigilar al pícaro en todo momento. Más tarde, Eliot y Elmo compartieron una guardia y el primero decidió irse. Elmo le intentó disuadir, pero el joven humano ni si quiera se paró a escucharlo. Elmo despertó al resto del grupo y les informó de la situación, todos se quedaron sorprendidos por la actitud de Eliot que empezaba a levantar curiosas sospechas en el seno del grupo. En el turno de guardia de los gnomos, Gáremond se convirtió en la pesadilla de Eliot a quien no dejó descansar correctamente.
Una nueva jornada despertó y antes de acceder al siguiente nivel, todos decidieron despojarse de las vestiduras del Templo de la Tierra, pues se esperaban encontrar con los acólitos del Templo del Agua inmediatamente.
Ya en el segundo nivel, encontraron una fuente con la estatua de un minotauro de piedra. Lía se acercó para inspeccionar la extraña figura cuando esta pareció cobrar vida y arremetió contra ella. A pesar de la furia del hombre toro, no hubo que lamentar víctimas, pero todos se llevaron un buen susto.
Más tarde accedieron a unos barracones donde poco a poco iban derrotando a varios enemigos que no parecían pertenecer a ninguna facción en concreto del templo. En el fragor de la batalla, Lía erró su apoyo en una pierna y lanzó una flecha en dirección a Eliot, quien sufrió una brutal herida a pocos centímetros del corazón. El fuego amigo casi extermina al joven, que quedó tendido en el suelo. Gáremond lo atendió para que no perdiera la vida.
Poco más tarde y tras un buen intercambio de golpes, una estocada del líder de los bandidos provocó que Lía estuviera al borde de la muerte, pero Eliot acudió raudo a socorrerla y logró salvar la vida de la elfa. Poco después, el líder quiso rendirse y todos respetaron su decisión. Este llevaba una capa negra con extraños símbolos que, a pesar de resultar familiar a los compañeros, no supieron descifrar qué significaba.

31 comentarios:

Eliot dijo...

Bueno, creo que estamos ante otra crónica "polémica". Se omite que yo estabilicé a Lía después de su "accidente" pero deja bien claro que el inútil con aires de grandeza de Gáremond me salvó la vida.

Pero lo más turbador es que no recoge el hecho de que los secuaces y monstruos del Templo del Mal Elemental parecen recibir órdenes "de más arriba o superiores" que dan prioridad a atacar a compañeros animales, en especial si ese compañero animal es una serpiente.

Caelestis dijo...

¿A qué accdidente te refieres?

En cuanto a los familiares, si luchan, pueden morir... jeje

Eliot dijo...

El "accidente" es cuando me disparo por supuesto error. Podría haberle guardado rencor pero no lo hice, y en el último combate la estabilicé cuando estaba a -7.

Desde aquí inicio la campaña LOS COMPAÑEROS ANIMALES MERECEN EL MISMO TRATO QUE LOS AVENTUREROS.

Caelestis dijo...

Ya está corregido, si quieres que los familiares tengan el mismo trato que los aventureros, los avenuteros también sufrirán mi IRA.

Eliot dijo...

Pero no lo digo para corregir la entrada, ya sabes que comento por decir algo en plan broma.

Pero lo de los compañeros animales sí que es verdad, ¿para qué va un minotauro a girarse para atacar a una serpiente mediana que hace d4 -1 de daño más veneno? Yo no estoy de acuerdo en que mi serpiente entre en la tirada de dado al azar para ver a quién ataca el enemigo. Para atacar a una serpiente tiene que agacharse y no creo que este para eso mientras este rodeado. Como siempre que ataca mi serpiente ataco yo al mismo, quiero que me asignes dos números del dado al azar y dejes a la serpiente en paz. Es un trato justo, ¿no? Además no está ignorando la serpiente, esta atacando a su dueño y dejandome fuera de combate mi serpiente también se retiraría...

Caelestis dijo...

Bueno, no pasa nada por corregirlo, muchas veces pasa algún día hasta que hago el resumen y tiendo a apuntarme menos cosas conforme avanza la sesión, asique entre eso y mi amnesia no recuerdo muchos detalles jeje.

Lo de los familiares, pues tienes algo de razón, lo estudiaré. Aunque si se trata de algún enemigo sin inteligencia, esto no sirve.

Eliot dijo...

Bien, es un triunfo para la asociación de amigos de los compañeros animales. Piensa también que un animal mediano o grande sin inteligencia tampoco va a agacharse para atacar, en todo caso intentaría pisarla y gastaría un ataque haciendo el moña. Atacaría a lo primero que ve y la serpiente tienes que mirar hacia abajo para fijarte en ella...

Vadania dijo...

El tema de tener que agacharse me parece bastante flojo, Rubén. Entiendo que no te guste que ataquen a tu compañero animal, pero esa excusa es muy barata. xD

Si no quieres que sufra daño, no la expongas en los combates y ya está. Para los enemigos es un oponente más al que finiquitarse.

Eliot dijo...

Ni hablar. No estamos hablando de un mediano o gnomo considerados pequeños, es algo mucho más pequeño y ataca a ras de suelo. Cuando esta sola alrededor de un enemigo, veo normal que le ataque. Pero cuando lo rodeamos entre varios, no creo que un enemigo se giré y se centre en una serpiente mientras le atacamos con espadas desde las casillas cercanas. Además cada ataque implica chocar su arma contra el suelo, dejándole en indefenso. Es tán estúpido que reto a todo el que quiera a hacer una simulación antes de la próxima partida de como sería esos ataques, para ver si os parece lógico o no.

Caelestis dijo...

La Ira de St. Cuthbert caerá sobre vuestros familiares, incluido el sapo de Rosco que no tiene culpa de nada! JAJAJAJA (risa maléfica)

Vadania dijo...

¿Estás intentando aplicar la lógica al D&D, Rubén? Si es atacable, se le ataca como al resto y punto. ;D

Vadania dijo...

Además, acabo de leer la entrada del compañero animal en la clase del druida y resulta que tu sierpe es de tamaño pequeño o mediano. Así que hasta puede que sea más grande que Rosco, Gáremond o Wonilon. Y si encima el veneno hace daño a la constitución, apaga y vámonos.

Venga, no te molestes, Rubén, que no es por joder. Te aseguro que si fuera el compañero animal de uno de nuestro rivales, yo la tendría en cuenta a la hora de repartir felpa.

Eliot dijo...

¿Como va a ser tan grande como el gran Wonilon? ...

Mira, esto ya se considera una serpiente grande: http://pacojonnes.files.wordpress.com/2009/07/piton-albina-2.jpg . Vale, ponle que en D&D hay mucho más grandes, pero no nos pasemos porque su daño es d4 -1 más veneno de salvación 11 (puf). La excepcional daga de Wonilon hace más daño, así que sus colmillos no deben de ser muy grandes. ¿Y un enemigo, eligiendo rival al azar, la escoge a ella y se agacha para pegarle? ¿Y los adyacentes no tienen ataque de oportunidad? No cuela.

No me estoy molestando, estamos debatiendo. No hay reglas sobre a quienes eligen los malos para atacar y me parece bien que sea al azar y también que yo me lleve el doble de oportunidades por cubrir a mi serpiente. ¿Pero que un minotauro ataque con su hacha a la serpiente estando rodeado? Eso no se lo cree nadie. Y claro que quiero aplicar la lógica a D&D excepto cuando entremos en lo fantástico. No estoy quejandome de que un anillo de +1 a la CA. Pero en la mesa ya discutimos si los enemigos atacan a los caídos y esto es similar, ni más ni menos.

Y repito que no es un pique, estamos debatiendo entre colegas los planteamientos de la asociación de amigos de los compañeros animales. El sapo es un caso similar, ¿te imaginas al minotauro girandose para buscar al sapo y atacarle en mitad del barullo? xD

Caelestis dijo...

No estoy de acuerdo: Wonillon hace 1d3 con su daga y según el manual de monstruos, una serpiente de tamaño similar al del gnomo hace 1d2 con sus colmillos, es más, para hacer 1d4-1 como hace la de Eliot tiene que ser mediana que es mas grande que cualquier gnomo o mediano y de tamaño similar a un humano. Voy más allá, una serpiente constrictor (sí esas que son grandres de cojones) hace 1d3+4, cuyo incremento se debe a la gran fuerza que tiene, pero aún así el dado de daño es menor al de la serpiente de Eliot. Si nos ponemos tiquis miquis... 1ºla serpiente es de tamaño humano, 2º no la puedes llevar escondida en la bota, 3º yo soy el DM y voy a hacer lo q me salga de la bolsa escrotal... xD

Vadania dijo...

Totalmente de acuerdo con Manolo. Y luego está la idea del AdO, reglada y explicada en el Manual del jugador (y no aplicable al caso que comentas Rubén).

¿Agacharse? ¿Por qué no? ¿Acaso piensas que los pjs están quietos mientras luchan? Pues no, señor. Resulta que están en constante movimiento.

Si yo fuera el minotauro, te aseguro que preferiría sufrir el 1d4 de daño por la espada corta que el 1d4-1 del mordisco más el posible 1d6 a la constitución por el veneno.

Por otro lado, por supuesto que pueden intentar atacar a Hop durante el combate. El caso es que primero deben verlo (por lo de la ocultación total y eso), ya que siempre anda metido entre las ropas de Rosco para no exponerse a los posibles caprichos de cualquier minotauro. xD

Eliot dijo...

Bueno, bueno... esto se esta poniento interesante. Creo que merezco un premio por incitar al post con más comentarios del blog de la aventura.

Mi serpiente ocupa 5' y dudo mucho que ataque enrollada porque no es una cobra. Así que mi serpiente, de tamaño mediano, ocupa 5' como toda criatura pequeña o mediana pero en ningún momento equivale al espacio que gasta, por ejemplo, un gnomo. Así que en ningún caso puede considerarse más grande ni siquiera igual en tamaño total al gran Wonilon. Su descripción como "mediana" viene a ser en cuanto a probabilidades de darle enfocado como enemigo y a cuanto ocupa en las casillas, pero me niego a aceptar que sea un enemigo más para los malos que nos atacan. Y llevo la serpiente enrollada por toda la pierna, no escondida en la bota.

Master, no deberías crearte un enemigo en alguien que controla el 40% de los comentarios del blog y que es presidente de la asociación de amigos de los compañeros animales. Somos un grupo de presión influyente e importante, xD

PD: Creo que Eliot ha llegado más lejos de lo que toda la mesa había supuesto... Es el líder encubierto del grupo, que sigue un camino místico: es el Locke de nuestra aventura.

Vadania dijo...

"Me niego a aceptar que sea un enemigo más para los malos que nos atacan".

He aquí el problema real de toda la discusión, amigo mío. Si no quieres que sea uno más, no la saques en los combates y santas pascuas.

Caelestis dijo...

En cuanto al tamaño, tratándose de una víbora mediana a todos los efectos, si te fijas en su entrada en la CA, no tiene ninguna bonificación por tamaño, lo que significa irremediablemente que es tamaño humano.

Por cierto, record absolutísimo de comentarios y eso que sólo somos 3 discutiendo...

Eliot dijo...

Lo considero enemigo secundario. Entiendo que le disparen flechas como a cualquier enemigo o que le intenten pegar cuando esta más cerca que otro enemigo. ¿Pero un minotauro rodeado se va a poner a buscar una serpiente para pegarle? Yo no lo veo lógico, de ahí que no quiera tratarla como "un enemigo más".

Por desgracia, sino la saco para pelear, es perder una cualidad de mi clase druida, porque mi compañero animal solo sabe el truco de atacar. Es como hacerte un mago de inteligencia 9 o un bardo con una raza que no toca instrumentos musicales y no tiene voz: pierdes atributos con los que jugar. Ya que ha quedado claro que un compañero animal es virtualmente inútil ya que no sigue tus órdenes salvo con los trucos, mi serpiente se quedaría en nada. No es igual que tu sapo, que te sigue dando puntos de vida; mi serpiente no haría nada de nada, y no me parece justo. Gáremond lo hace y a mi personaje le parece una vergüenza de actitud...

Pero a ver, ¿que quieres decir con tamaño humano? Porque ocupa 5' y no ataca de pie... Si fuera tan grande ocuparía como mínimo 10'. No estoy pidiendo ninguna modificación de regla oficial, sino que se le excluya de los ataques al azar realizados por enemigos que están rodeados por otros rivales y a cambio me llevo yo esa posibilidad. No creo que me este beneficiendo excesivamente ni este planteando algo absurdo...

Vadania dijo...

Pues yo sí lo creo. xD

Caelestis dijo...

Rubén, ¿En serio Eliot sacrificaría su vida antes por una culebra que por un compañero del grupo?
Yo sí me estoy refiriendo a las reglas: Tamaño mediano= tamaño humano= ocupa casilla de 5'. Si tu serpiente está enrollada o no, deja de ser relevante. Lo importante esque su "bulto" es igual que cualquier otro pj. En el caso de lo que tú planteas, ¿También debería ignorar a Gáremond, Rosco y Wonillon a la hora de atacar si me veo rodeado por otros más grandes como Emén o Elmo? Yo creo que lo lógico y lo más justo es que pueda atacar a quién esté dentro de mi rango. Es como si cuando derrotásteis a Falrinth este hubiera absorbido los golpes a su familiar Quásit (Jose aún no estaba).
En principio Rubén, y para concluir esta extensa disputa intera, si atacas con tu familiar, estas dispuesto a perderlo en combate.

Vadania dijo...

Perdón, que antes le dí a "publicar comentario" en lugar de a "vista previa".

Efectivamente, por fin te has dado cuenta. Si tu sierpe es de tamaño mediano, quiere decirse que ocupa lo mismo que un humano (no que tenga la misma capacidad o volúmen, sino que abarca el metro y medio de espacio físico que representa una casilla en el D&D). Y por ende, es más grande que el gran Wonilon. xD

Eso de que si fuera de tamaño humano ocuparía 10´ no tiene ni pies ni cabeza.

Si quieres que tu compañero animal sea más efectivo (entiende que ahora sólo eres druida de nivel 1), enséñale más trucos o mejora en esa clase.

Caelestis dijo...

Como prueba de que soy un DM benevolente y que llevo sin cargarme a nadie mucho tiempo (conforme a lo que viene siendo habitual). Si quieres puedes cambiar el truco de tu serpiente.

Eliot dijo...

Esta bien, acepto que se quede como está, pero aún así voy a acabar mis alegaciones.

Eliot no está sacrificando su vida antes por una culebra que por un compañero de equipo. Los compañeros de equipo en esta discusión no pintan nada porque la posibilidad de golpear a la serpiente me la llevo yo. Imaginate que el Minotauro esta rodeado por Emén, Elmo, la serpiente y yo, pues según mi método sería 25% para Emén, 25% para Elmo y 50% para Eliot (el método con el que nos quedamos: 25% para Emén, 25% para Elmo, 25% para la serpiente y 25% para Eliot). Así que no estoy anteponiendo la vida de mis compañeros humanos al de mi compañero animal.

Y respecto al tamaño, pues volveré a explicarme. No sé si sabéis como es una serpiente, es alargada y está en el suelo, y mide 5' de largo en el suelo según las reglas. Compararlo con un mediano, gnomo o cualquiera similar, con todos mis respetos, es estúpido, porque mientras la cabeza de un mediano esta a la altura del abdomen humano la cabeza de la serpiente esta en el tobillo (y venga, porque le concedemos que se eleva un palmo para atacar). ¿Seguro que no hace falta agacharse para atacarle? No sé, ya me diréis si vosotros podrías atacar a una culebra sin agacharse con un arma en la mano. Y si, ya sé que es de la categoría mediana, pero eso es a efectos de dificultad de golpear cuando estas enfocado y las casillas que ocupa. ¿Acaso mi serpiente no puede entrar en lugares donde si entra un mediano porque es de tamaño superior? Lo dudo mucho.
Y claro que no tiene repercusión en las reglas. Pero si el enemigo está rodeado no me parece lógico que tenga las mismas posibilidades de pegarle porque si a Eliot o a Rosco que a una serpiente que tiene que localizar en el suelo y agacharse para golpear, sin ser ni mucho menos una amenaza superior al resto.

En fin, lo que diga el Master es lo que es, pero mejor será que no saquéis el tema en la mesa porque si no voy a volverme insistente...

Vadania dijo...

¿Eso era una amenaza? Pues entonces insiste, insiste, que para cabezones, colores. xD

Está claro que una serpiente es una serpiente y que un gnomo es un gnomo, pero no me vuelvas con el tema de la lógica. Te recuerdo que esto es D&D y que hay toda una serie de reglas relativas al espacio, tamaño, ataques, ect, que aclaran perfectamente lo que estamos discutiendo. Y no tienes razón al respecto.

¿Que no te gusta el reglamento en ese punto? De acuerdo, pero no quieras hacernos pasar por el aro, que no vamos a hacerlo. Si el máster acepta tu "chanclirregla" porcentual, yo me callo. Pero que conste que no la comparto porque estaríamos sentando un turbio precente de cara al futuro. ¿Quién dice que nuestro próximo enemigo no vaya a ser un druida malvado con su familiar, al que no podríamos atacar según tu exposición anterior?

Veredicto visto para sentencia. El jurado popular desestima las alegaciones de Eliot. ;D

Eliot dijo...

Claro que tengo razón al respecto, porque yo en ningún momento he dicho que el tamaño de mi serpiente deba cambiarse o las reglas de D&D estén mal. Que yo sepa (corrígeme si me equivoco) en ningún sitio se dice que los enemigos atacan a sus rivales al azar y este establecido como regla, así que no quiero cambiar ninguna regla.

El maloso druida con su familiar (¿es multiclase? Que malvado...) no puede proteger a su familiar porque nosotros no atacamos al azar, no como los malos, que atacan al que le salga el dado. Si existiera el conseso de que el Master no haga ataques al azar sino que se centre en alguien particular ya hablaríamos de otra cosa...

Vadania dijo...

No, no tienes razón. Si el máster tira al azar para que me dé a mí o a ti, también debe incluir en esa probabilidad a cualquier otro sujeto que haya en el combate.

Caelestis dijo...

Bueno bueno, esto tiene pinta de no acabar nunca...
En primer lugar, si tiro el dado es pq quiero y me parece justo, pero un día podría decidir no hacerlo o inventarme otro sistema o atacar a alguien en concreto porque quiero hacerlo, de hecho en muchas aventuras te dicen: "este enemigo atacará primero al lanzador de conjuros" o "al enemigo que parezca el líder", etc. Pero muchas veces se deja a discrección del DM.
Con respecto al tamaño, está claro. Tu serpiente es de tamaño humano porque no gana bonificador a la CA. Un gnomo sigue ocupando 5' y al ser más pequeño si tiene bonificador a la CA. Por eso se deduce que no es que sea más pequeño que un humano y ocupe lo mismo.
Y sí, como esto siga así, no dudes que durará hasta la próxima sesión o incluso más allá xD.

Eliot dijo...

El fundamento de atacar al azar se basa en que la pelea es muy rápida y el enemigo no tiene tiempo para pensar. Se está protegiendo con el escudo mientras mueve su arma a los lados e intenta darle a lo que buenamente pueda. Porque si tuviera un mínimo de tiempo de descanso, vería cual de sus rivales esta más tocado y así le atacaría para acabar con él (que es lo que hacemos los pj). Y más en el caso de que te ataquen desde varios sitios separados: tu mueves el arma y le das a lo que puedes mientras intentas preveer lo que hacen los enemigos fuera de tu campo visual.

¿A qué viene entonces que se gire y ataque al suelo dejando al descubierto toda su espalda y agachando su cabeza a la altura de las armas de sus rivales?

Eliot dijo...

Pero si yo tengo claro que mi serpiente ocupa 5' y es de tamaño mediano, no estoy pidiendo ningún bonificador a la CA...

Creo que está claro, pensamos distinto y ya se ha tomado una decisión que respeto. Pero en serio, no quiero tratarlo en la mesa.

Caelestis dijo...

Primero: ¿Esa regla de atacar aleatoriamente de dónde la has sacado? ¿de la logica? Si los pj pueden pensar a quién atacan los monstruos también deberían poder hacerlo. El monstruo ataca a lo que el DM quiere y si quiere atacar al más débil o más tocado para dejarlo fuera de combate está en su perfecto derecho.
Tu serpiente ataca a ras de suelo ¿por qué? ¿eso dónde lo dice? lo más normal para una serpiente de ese tamaño es atacar a la altura de la cintura por lo menos y eso pensándolo en términos reales, no épicos fantásticos como lo que es d&d